Figura de la izquierda, Henri Weber murió el domingo 26 de abril a la edad de 75 años, víctima de la Covid-19. Hablamos de su carrera y de su personalidad, con Janette Habel, que era su amiga a pesar de los desacuerdos políticos que pudieron haber tenido.

¿Cómo conoció a Henri Weber?

En mayo 68 ¡por supuesto! [Silencio]. Rectifico, antes del 68 de mayo, después de nuestra exclusión de los estudiantes comunistas, cuando fundamos las JCR (Juventudes Comunistas Revolucionarias) y luego de la LCR (Liga Comunista Revolucionaria)1/. Pero el período más interesante fue el de mayo del 68. Henri desempeñó un papel muy importante, especialmente en las barricadas y en los enfrentamientos donde estuvo en las "tropas de choque" con Alain Krivine y Daniel Bensaïd 2/. Fue un buen organizador de estas manifestaciones. Fue entonces cuando nos conocimos. Henri siempre tuvo un gran talento de pedagogo, para la educación, la explicación, etc.

También teníamos en común nuestro origen judío polaco. Habíamos asistido a los campamentos de verano judíos que partían de la calle de Paradis. A menudo nos reíamos de estas tradiciones culturales, incluidas las culinarias. Recuerdos de la infancia... Luego compartimos años en las JCR y la LCR; hay que recordar que estas organizaciones eran muy diferentes de otras organizaciones de extrema izquierda, había una atmósfera extremadamente abierta de debate interno, con corrientes muy diferentes, pero también externas. Fue una experiencia excepcional, una solidaridad entre la juventud revolucionaria y las y los trabajadores, las críticas al capitalismo, la sociedad de consumo, el orden moral y, al mismo tiempo (y con mucha fuerza) la crítica a la burocracia en la URSS. Compartimos todo esto en los años 60 y 70. Hasta su partida al PS.

Precisamente, ¿cómo explica Vd. este paso del trotskismo revolucionario del sesenta y ocho a la socialdemocracia, al PS y su dirección, los mandatos del senador y el eurodiputado?

Henri había escrito con Daniel Bensaïd un libro llamado Mayo 68: un ensayo general. Pero la revolución nunca llegó. Esto fue vivido por nuestra generación como un punto de inflexión, una revisión de un cierto número de ideas, de utopías revolucionarias. Es esta gran decepción, esta desilusión, esta gran esperanza en la idea de que, como en 1917, habría una especie de Gran Soir en Francia. Desde la elección de Mitterrand en 1981, e incluso un poco antes, Henri comenzó a distanciarse hasta que se unió al PS en 1986. Entonces comenzaron nuestros desacuerdos. Creo que Henri luego pasó a la idea de que solo el mercado, a pesar de sus deficiencias, podría garantizar la democracia y ser compatible con el pluralismo democrático. Las reformas eran necesarias, pero ninguna conmoción radical en la sociedad, demasiado peligrosa. Tuvimos una discusión en 2017, cuando el centenario de la Revolución de Octubre, en la que me dijo que 1917 fue ¡un golpe! Se había distanciado de las luchas de liberación. También se convirtió a la idea de que la Unión Europea era el nuevo ideal de la socialdemocracia. Pero Henri nunca renegó de su pasado. Entonces sí, tuvimos muchas diferencias, desacuerdos, pero habíamos mantenido las relaciones de amistad. Hay que decir que Henri no era alguien agresivo, de confrontación, por el contrario, era alguien tranquilo. Tenía un cierto pudor, mucho humor y un distanciamiento de sí mismo y de sus compromisos.

Desde el anuncio de su muerte, los homenajes se han multiplicado en la izquierda, mucho más allá de las filas socialistas. ¿Cómo logró una figura como la de Henri Weber reagrupar de esta manera, a pesar de los desacuerdos políticos que Vd. evoca?

Hay tres razones para esto. Primero, porque en su comportamiento personal y militante, él era alguien siempre respetuoso con los demás, independientemente de los desacuerdos. Escuchaba, argumentaba, pero nunca insultaba. Y no fue rencoroso. Pudo haber sido atacado violentamente, acusado, pero nunca respondió en ese terreno, nunca respondió agresivamente. Además, él era una persona culta. Hay que decir que las formaciones políticas y teóricas de la LCR eran de muy alto nivel, además de un consenso pluralista. Henri fue formado, como todos nosotros, en este contexto. Pero incluso en el PS, siempre ha tenido un nivel político más alto, siempre con la preocupación de la formación, la educación.

Otra cosa, si bien cambió de ideas, no escupió sobre su pasado. En su último libro, Rebelle Jeunesse, reivindicó su pasado, mayo del 68, incluidos los errores que habíamos cometido, no ensució nada. Esto es muy importante. Finalmente, Henri era alguien leal. Fiel en la amistad, siempre estuvo disponible si necesitábamos su ayuda o de un favor, pero también en política. ¡Todavía se quedó en el PS a pesar de la gran crisis de después de 2017! Una anécdota: cuando escribió Rebelle jeunesse, cenamos juntos en su casa. Le pregunté si ya estaba escribiendo el segundo volumen sobre el PS. Él respondió: "Debemos esperar. En política, la cosa siempre termina mejorando”. No habrá escrito este segundo volumen... Henri era fundamentalmente optimista y de una gran serenidad. Por eso era tan respetado.

¿Es importante tener, en la izquierda, este tipo de personalidad? ¿Carecemos de ellas estos días?

Sí, es precioso. Es precioso poder respetar la pluralidad de pensamientos teóricos y políticos, poder respetar los desacuerdos. Con Henri, podríamos gritarnos, pero no recuerdo haberlo visto enojado una vez. Mantuvo vínculos con Alain Krivine, Daniel Bensaïd, con todos nosotros hasta el final. Hoy faltan personalidades así, pero sobre todo espacios para el diálogo, el pluralismo y el respeto, más allá de las diferencias, los desacuerdos. La era en que vivimos es tan difícil que no podemos permitirnos prescindir de estas cosas. Con Henri, era posible.

28/04/2020

Janette Habel es politóloga, especialista en América Latina.

http://www.regards.fr/politique/article/on-manque-de-personnalites-comme-henri-weber-de-nos-jours

Notas

1/ En realidad, el congreso del 1969 en Mannheim que se celebró del 5 al 8 de abril de 1969 fue para la constitución de la Ligue Communiste, no de la LCR que solo se constituyó en 1974 (ndlr VS).

2/ Cabe señalar de pasada que había muchas mujeres en mayo de 68 pero, en ese momento, los líderes, quienes hablaban mucho, eran hombres. Aunque el movimiento feminista ya había comenzado, las mujeres fueron marginadas.

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